Estudio sobre la radiación recibida por los pilotos

La radiación atmosférica producida durante la interacción de los rayos cósmicos con la atmósfera es considerablemente alta en altitudes típicas de vuelo y constituye un factor de riesgo para las personas y la aviónica a bordo de la nave. Por todo ello, y según se desprende del trabajo de Clarke y colaboradores, ya desde los años 90 del pasado siglo, las tripulaciones aéreas están consideradas como personal expuesto a radiación con una de las mayores tasas anuales de dosis efectiva absorbida.
Así, no es de extrañar que exista un número elevado de comunicaciones al respecto por parte de la International Federation of Air Line Pilots’ Associations (IFALPA) sobre protección a la radiación ionizante (notas 19HUPBL01 y 19HUPBL06) o la exposición ocular a la radiación ultravioleta (nota 19HUPBL06) y que incluso la European Union Aviation Safety Agency (EASA) edite boletines relativos a los efectos de la radiación atmosférica sobre la electrónica de los aviones (2012-10R1).
En estos y otros trabajos publicados en el ámbito científico como el de Bartlett [2] se estima que la tasa de dosis de radiación recibida a las alturas típicas de vuelo puede alcanzar los 5 Sv/h, atribuida en términos generales a fotones, electrones y positrones en un 25%, a protones en un 15%, a muones en un 5% y, por último y mayoritariamente, a neutrones en un 55% (Fig. 1). Igualmente, es importante destacar el proyecto REFLECT (REsearch FLight of EURADOS and CRREAT), en el que se instalaron más de 20 dosímetros y detectores de radiación en un pequeño avión Embraer Legacy 600 que despegó y aterrizó en el aeropuerto Vaclav Havel de Praga (República Checa) y voló durante 90 minutos a una altura de 39.000 pies. Una de las principales conclusiones de esta campaña de mediciones fue que los detectores de radiación neutrónica convencionales tienden a subestimar la dosis recibida dado que no tienen la suficiente sensibilidad a los neutrones de alta energía [3].
Ante tales evidencias, y por ser precisamente la radiación neutrónica la más importante a las alturas de vuelo, se ha diseñado e implementado un nuevo código de simulación numérica llamado ACORDE (Application Code for the Radiation Dose Estimation), el cual está basado en cálculos Montecarlo para estimar la dosis efectiva absorbida por las personas a bordo durante un vuelo comercial mediante el uso de códigos de simulación de última generación teniendo en cuenta la trayectoria del vuelo obtenida de Flightradar24 (Fig. 2), las condiciones geomagnéticas y la atmósfera en tiempo real a partir de GDAS, el efecto del fuselaje del avión utilizado y un maniquí antropomórfico.